- Disponer de datos cuantitativos, objetivos, fiables y válidos sobre la calidad de la atención prestada
- Unificar la medida y, por lo tanto, facilitar la comparación
- Facilitar un instrumento de evaluación a los profesionales
- Disponer de unos estándares de buena práctica
- Disponer de una base de datos común con resultados fiables, válidos y comparables
- Corporaciones y entidades prestadoras de servicios sociales y sociosanitarios
- Administraciones públicas
- Centros de atención residencial
- Centros de atención diurna
- Servicios de Atención Domiciliaria (SAD)
- Servicios de atención a población vulnerable o en riesgo (infancia, mujeres víctimas de violencia, sin techo, etc.)
- Servicios de inserción laboral
Los indicadores son instrumentos de medida que nos permiten expresar cuantitativamente aspectos de la atención, la organización o la gestión, sirviendo como guía para evaluar la calidad o la adecuación de la actividad realizada. La existencia de un conjunto de indicadores unificados y metodológicamente robustos permite conocer de forma objetiva el funcionamiento de los centros y servicios, además de facilitar la comparación de resultados. Esta información supone la base para que cada servicio, centro o profesional pueda detectar los aspectos de la práctica susceptibles de mejora y desarrollar su propio plan de mejora de calidad.
También constituye una gran ayuda para el seguimiento del cumplimiento de las prescripciones técnicas para la gestión de los servicios públicos externalizados.
La metodología de elaboración de los indicadores, que requiere la definición de criterios de calidad comunes, promueve la estandarización de la práctica, reduciendo la variabilidad no deseada entre centros, servicios e incluso profesionales.
Cuando la evaluación se realiza utilizando la metodología de indicadores consensuados, el proceso pretende, además de garantizar un nivel de calidad, potenciar la implicación de los centros y del sector a fin de que sirva de impulso hacia la mejora continua de la calidad de la atención dispensada y percibida por los usuarios y sus familias.
La responsabilidad de la Administración y de las propias organizaciones obliga a garantizar el desarrollo armónico del conjunto del sector y que los niveles considerados aceptables de calidad se cumplen en los centros.
También cabe destacar que una evaluación externa de la calidad puede dar respuesta a diferentes requerimientos normativos o de contratación, sin perder de vista que la principal finalidad es identificar oportunidades de mejora en los procesos de atención que repercutan directamente en los resultados esperados con la prestación del servicio.
Objetivos generales
- Realizar una evaluación externa que genere información útil para la toma de decisiones para mejorar la calidad e un programa o servicio.
- Efectuar un análisis de resultados e impacto a través de la evaluación de indicadores, mediante la aplicación de un método riguroso y contrastado.
Objetivos específicos
- Identificar el nivel de cumplimiento de los procesos de atención que se realizan en las principales áreas evaluadas mediante los indicadores de calidad seleccionados.
- Obtener información valida, fiable y contrastada a través de indicadores de los procesos clave y de los indicadores de estructura y resultados asistenciales objeto de evaluación.
- Identificar y analizar las oportunidades de mejora que se consideren más importantes para la atención de las personas y sus familiares, si procede), así como los sistemas organizativos y de trabajo en equipo que se detenten mediante la evaluación.
El trabajo se realiza conjuntamente entre los miembros de la organización contratante y los profesionales del Instituto Avedis Donabedian. Se aplican en este proyecto los métodos de consenso habituales en el ámbito de la mejora continua de calidad. El Instituto Donabedian realiza las funciones de apoyo metodológico del proyecto y la coordinación global para garantizar la elaboración de un sistema de indicadores homogéneo.
La característica más destacada de la metodología es el consenso:
- Un grupo de profesionales especialmente implicados trabaja directamente la elaboración de los indicadores de calidad, en lo que se considera la fase de consenso interno. El análisis crítico y el intercambio de opiniones entre los miembros de este grupo de trabajo permitirá la unificación de criterios de calidad sobre aspectos relevantes de la atención.
- También se busca el consenso externo con la participación de un grupo más amplio de expertos en la fase final de revisión del documento.
La metodología de trabajo es altamente participativa:
- La participación de un importante número de profesionales en la elaboración o la revisión del documento refuerza la coresponsabilización, facilitando la adopción y utilización del documento final.
Se incorpora la evidencia científica en la elaboración de indicadores:
- Se realiza una búsqueda sistemática de la evidencia en fuentes nacionales e internacionales. Se tienen en cuenta los resultados de investigación existentes para definir los indicadores de calidad de manera que reflejen la evidencia científica del momento.
- La evaluación contribuye a identificar en qué medida la organización está trabajando para alcanzar los resultados esperados.
- Es un dinamizador de los procesos de mejora y aprendizaje de la organización. Permite la comparación o benchmarking cuando se evalúan diferentes organizaciones o entidades de un mismo sector.
- Ayuda a centrar los temas claves para orientar la organización hacia la atención centrada en la persona.
- Contribuye a la mejora de la satisfacción y calidad de vida percibida por las personas atendidas.
- Mejora de la seguridad y reducción del riesgo en la atención a las personas.
- Anima a las organizaciones en su búsqueda de la excelencia teniendo en cuenta el mejor uso de los recursos disponibles.
Proyectos de evaluación de indicadores
- Evaluación de indicadores en centenares de centros, de servicios sociales de diferentes tipologías
- En los últimos 20 años hemos tenido la oportunidad de evaluar mediante indicadores de calidad consensuados más de 1.511 centros y 68.616 historias clínicas o expedientes asistenciales.
- Nuestra experiencia en el diseño, evaluación y mejora de indicadores nos permite ofrecer a las organizaciones el apoyo necesario para que puedan implantar oportunidades de mejora dentro de la propia organización.
Ejemplos de indicadores evaluados por la FAD
- Servicios de atención domiciliaria
- Centros sociosanitarios de subagudos, convalecencia, larga estancia, cuidados paliativos y atención ambulatoria y domiciliaria
- Residencias de personas mayores y centros de día
- Centros residenciales y centros de día para personas con discapacidad intelectual y física
- Servicios de atención a la infancia en situación de riesgo o de desamparo
- Centros de atención temprana y desarrollo infantil
- Servicios residenciales para mujeres en situación de violencia
- Comunidades terapéuticas, centros y pisos tutelados para el tratamiento de la adición a las drogas
- Servicios de inserción laboral para personas con trastorno mental y clubs sociales
- Servicios sociales básicos y especializados
- Evaluación de planes de inclusión social
- Entidades tutelares
- Unidades de agudos, patología dual, hospital de día, servicios de rehabilitación, urgencias psiquiátricas y servicios de atención ambulatoria de salud mental (adultos e infanto-juvenil)
La realización de la evaluación externa de los indicadores de calidad se llevará a cabo por parte de personal evaluador del Instituto Donabedian, especialmente preparado para esta tarea y sujeto a las normas de actuación éticas y de confidencialidad de nuestra institución.
El presupuesto para la evaluación se acordará en función de los dispositivos a evaluar, el número de indicadores y el tamaño muestral necesario para valorar los diferentes indicadores. La concreción del presupuesto se efectúa después de primer contacto o reunión para clarificar objeto de evaluación.
El presupuesto acordado incluye los gastos de desplazamiento del personal evaluador y se aplicaran los impuestos que establezca la normativa vigente.